sábado, 13 de octubre de 2007

RELACIONES SINTÁCTICAS: SUJETO Y PREDICADO.


1.- El concepto de oración y sus constituyentes: sujeto y predicado.

La oración, en cuanto signo lingüístico, mantiene una relación de predicación con la realidad extralingüística. Tal realidad se distribuye y analiza en la mente en cuanto sujeto lógico -aquéllo que ya conocemos- y en predicado lógico -lo que predicamos del sujeto lógico-. De este modo relacionamos esto con el tema, o información conocida, y el rema, o lo añadido. No obstante, en la elaboración lingüística sujeto y predicado gramatical pueden no coincidir con sus homónimos lógicos. Por ejemplo: conozco que he enviar unas cartas -sujeto lógico- pero no sé a quién -predicado lógico-: si enuncio ¿Quién recibirá las cartas? El sujeto lógico ha pasado a gramatical y el predicado lógico a sujeto gramatical.

De ahí que podamos afirmar que el sujeto mantiene una relación de predicación de una variable: el sujeto. Esta variable se define habitualmente con la idea de un ser o hecho concebido en sí mismo, es decir:un sustantivo u otra estructura o categoría que funciona como tal:

/una oración subordinada sustantiva: No me importa que vengas tarde.

/un pronombre ¿Quién es el presidente?

/un infinitivo nominalizado: El maldecir es una costumbre poco recomendable para la paz interior.

/un adjetivo sustantivado: El rojo es mi coche.

Por eso, tanto la Gramática de Dependencias como el Postestructuralismo afirman que, en virtud de esta naturaleza predicativa, la oración tiene como único componente obligatorio tal núcleo predicativo, el verbo, en torno al que se agrupan otras variables, entre las que se encuentra el sujeto. De ahí que, como veremos más abajo, la obligatoriedad del sujeto quede en entredicho en la definición tradicional y generativista de la oración reescrita como SN + SV (V + Pdo.).

2.- La concordancia entre sujeto y predicado.

Ambos elementos mantienen una estrecha cohesión desde el punto de vista morfológico y sintáctico: la concordancia. Los verbos españoles tienen morfema de persona y número que concuerdan con el sujeto por el siguiente cuadro desinencias, asumiendo el sujeto en la morfología y haciendo su presencia en ocasiones innecesaria: ¿Te vas?:

Generales Perfecto simple Imperativo

Yo 0 0 -

- s - ste 0

Él, ella o usted 0 0 -

Nosotros-as -mos -mos -

Vosotros-as -is -steis -d

Ellos-as o ustedes -n -ron 0

Por otro lado, existen solecismos, o errores de concordancia, en sentido estricto: El botón de los pantalones me aprietan. Pero también es cierto que hay discordancia ad sensum, o psicológica: así en verbos de estimación cobra mayor importancia el complemento indirecto pues es el que adquiere mayor relevancia informativa: A nosotros nos gustan el fútbol; o, en ocasiones, cuando se quiere ponderar la pluarlidad de un colectivo morfológicamente plural: La multitud, después de mucho griterío, se avalanzaron sobre el orador.

Los sujetos con sintagmas nominales coordinados acostumbran a concordar en plural: La vida y la muerte son misterios del hombre. Salvo si el segundo núcleo nominal no viene actualizado por sí mismo, sino que toma la actualización del elemento anterior, uniéndose con él: El coser y planchar es una tarea deagradable.

Cuando el verbo está antepuesto puede concordar con el primer sintagma nominal: Le impresionó el amanacer y el color miel del cielo. Otras veces, sencillamente concuerda con el más próximo: Le dijo el grupo de amigos y su hermano que no llegara tarde.

Por otro lado tenemos discordancias semánticas en los llamados plurales de modestia y mayestático, donde se usa la primera persona del plural por la del singular. En aquél para hacer desaparecer un yo a veces presuntuoso o para compartir retóricamente la responsabilidad de la opinión vertida: Mantenemos que tal teoría es errónea. En el mayestático, para marcar el carácter representativo de una pluralidad en una persona: Nos, el rey.





3.- El problema del sujeto como agente: la definición semántica.

La gramática tradicional define al sujeto como aquél que realiza una acción –Juan compra cupones cada día-. No obstante, la idea de un sujeto agente se ve mermada por el hecho de que no da cuenta de las categorías semánticas que el sujeto puede adquirir.

· En las oraciones atributivas, al sujeto se le atribuye una cualidad; describe una cualidad o estado: Juan es alto.


· En la voz media, el proceso acaece en el sujeto sin que éste sea agente: Pedro se ruborizó ante los elogios.


· Igualmente hay sujetos que son lo contrario de agentes en cuanto son ellos los afectados por la acción verbal, es decir son pacientes: Visitación recibió una carta.


· Los sujetos adventicios no son agentes sino que un agente exterior les provoca la acción: Cuando se encendió la tele todos se callaron.


· Por el contrario, los sujetos causativos hacen que se realice la acción, pero no son ellos los agentes: Me corté el pelo ayer. En ocasiones es la propia cosmovisión del idioma el que desambigua, en cuanto, en sentido estricto, cabe la posibilidad de que el sujeto sea verdaderamente agente.


Podemos concluir, por tanto, en que el sujeto es una categoría gramatical que no puede definirse desde un punto de vista semántico como agente. Su función es una realidad funcional y gramatical que no implica necesariamente un solo caso semántico.



4.- Obligación del sujeto.



Según el postestructuralismo un acto de habla, o evento, -¡Que vengas!- es único en un espacio y un tiempo. A éste le subyace, en un primer grado de abstracción, una expresión, que es la oración con su entonación y contexto potenciales: Deseo que vengas. A su vez, la expresión se abstrae en un esquema oracional que prescinde de todo lo que no sea regido obligatoriamente por el verbo, y sus casos semánticos se sustituyen por marcadores indefinidos: Alguien desea algo.


Un esquema oracional supone obligatoriamente un núcleo predicativo, el verbo, y una serie de variables que pueden ser obligatorias o no. Entre estas variables se encuentra el sujeto, admitido por las oraciones con él –presente u elíptico-, pero inexistente en las impersonales: son pura predicación de una realidad extralingüística. Así tenemos las de fenómeno meteorológico: Llovió mucho anoche; las gramaticalizadas con haber, hacer, estar y ser: Es de noche, Está nublado, Hace frío, Hay gente importante,...; las absolutas con se: Se vive a gusto con los niños; entre éstas, si el verbo concuerda con el CD, son pasivas: Se venden botellas -en este caso sí tienen sujeto gramatical, el paciente, pero carecen de sujeto lógico en cuanto agente-, pero si no concuerdan con el CD serán activas: Se vende botellas.


Por otro lado tenemos los actos de habla unimembres, relacionados con la modalidad expresiva: ¡La policía!. En éstos el sujeto no está en el acto de habla porque ha sido omitido, no porque no exista: a este acto le subyace una oración con núcleo predicativo: ¡Viene la policía!. Con todo, es evidente que el hecho de que sean admisibles como unimembres es un hecho de norma: el uso comunitario de estas construcciones carentes de sujeto han provocado su fosilización como unimembres; pero el sistema de la lengua nos la desvela como eventos de habla que sí tienen un sujeto, aunque omitido.


Las oraciones de sujeto elíptico son las que lo tienen callado en el acto de habla por varias razones: los morfemas verbales de persona y número lo asumen, haciendo innecesaria su aparición: ¿Vienes? ; es posible que se desconozca: Han matado al presidente; o que quede sobreentendido por los interlocutores: Han barrido la calle.


5.- Tipos de predicación en español.


La estructura de la oración, según la definimos, la componen un sujeto y un predicado. Al mismo tiempo, la oración se compone de un dictum y de un modus. El dictum atiende al contenido de la representación y su reflejo en la naturaleza morfosintáctica y semántica de la oración. El modus -del que hablaremos por extenso al abordar la modalidad- añade la actitud y adhesión del emisor respecto a su enunciado: así el dictum Juan viene con una modalidad de apelación exhortativa produce la oración: ¡Que venga Juan! Atendiendo al dictum, las oraciones se pueden dividir en atributivas y predicativas.


5.1.- Predicado nominal.

Su estructura corresponde a un sujeto del que se atribuye una cualidad expresada en un predicado nominal. La cualidad, o atributo, se une al sujeto por medio de un verbo que funciona como mera cópula. Son éstos los verbos copulativos -ser, estar y parecer-, que expresan un modo del ser. De este modo su estructura es: Sujeto + Predicado Nominal (cópula + atributo).

El verbo copulativo puede omitirse en oraciones unimembres: ¡Qué linda [es]!. Por otro lado, puede funcionar incluso como verbo predicativo en oraciones intransitivas: ¡Es que no quiero!, Estaré en casa,... , con impersonales: Es de día; y como auxiliar: El coche ha sido fabricado por Seat.


Los verbos semicopulativos son verbos normalmente predicativos que varían su significado para expresar una cualidad del sujeto, pero sin llegar a ser meros nexos de unión: Los amigos quedaron contentos.

5.2.- Predicado verbal.

Las oraciones predicativas expresan un modo del suceder de la realidad extralingüística. En este sentido han sido clasificadas según criterios de voz -pasivas y activas-, de transitividad y reflexividad, e impersonales y no impersonales -de éstas ya nos hemos ocupado arriba, abordaremos ahora las otras-.

Las transitivas tienen un primer afectado por la acción verbal, el complemento directo (CD en adelante), al que necesitan para expresar por completo su significado, mientras que las intransitivas no lo necesitan. No obstante, las oraciones transitivas absolutas son las que no necesitan de un CD -Llorar- .

Las reflexivas son un subtipo de las transitivas: en éstas el sujeto y el término de la acción comparten referente: pueden ser directas si tal término es CD -Me abrigué- o indirectas si es complemento indirecto, o de acusativo griego -Me abrigué la cara-. Son causativas si el sujeto no es agente, sino, semánticamente, mediador para de la acción: Me construí un iglú.

Las llamadas reflexivas intrínsecas corresponden a los verbos pronominales cuyo significado acaece en el sujeto, sin que éste se constituya claramente como verdadero agente o término: Me arrepentí de lo que hice.


Algunos autores incluyen aquí las oraciones con dativo ético en cuanto es un término de la acción que puede coincidir con el referente del sujeto, si bien tal término es estilístico y elidible: Me cogí mi coche y me fui.

Las recíprocas son una modalidad de las reflexivas, pero en este caso se trata, semánticamente, de una pluralidad cuyos componentes se realizan la acción mutuamente: Los niños se daban balonazos.

Dentro de las intransitivas, Alarcos realiza la siguiente división desde una perspectiva semántica:

· Estáticas: expresan un modo de estar: Yo me comporto bien.

· Dinámicas: expresan proceso: Corrí ayer.

· Eventuales: son verbos transitivos en construcción eventualmente intransitiva: Ayer comí tarde.

Las oraciones pasivas no tienen a un sujeto agente que realice la acción verbal, como sucede con las activas, sino que su sujeto recibe la acción del verbo y es el complemento agente el que realiza tal acción. De ahí que éste pase a sujeto y aquél sea CD en la voz activa : Ese coche ha sido fabricado por Seat > Seat ha fabricado ese coche. Con todo, la norma impide esta transformación en algunos casos: Tengo dolores de espalda > *Dolores de espalda son tenidos por mí.


Las pasivas reflejas se forman con la marca se y con el verbo en tercera persona; pueden ser conmutadas por una pasiva perifrástica: Se ha firmado la paz > La paz ha sido firmada.


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Sintaxis de la oración simple

Sujeto
Clases
Activo
El que realiza la acción indicada por el verbo
Pasivo
El que recibe la acción indicada por el verbo
Elementos

Nombre

Categoría

Enlace

Ejemplo

Núcleo

Sustantivo, pronombre, infinitivo

ninguno

Tu amigo ha venido esta mañana.

Determinante

Artículo, adjetivo pronominal

ninguno

Tu amigo ha venido esta mañana.

Complemento preposicional (MI)

Sustantivo, pronombre, infinitivo

Preposi-

ción

El padre de Juan ha llegado hoy.

Atributo

(Mod. Directo)

Adjetivo calificativo, sustantivo

ninguno

Aquel hombre viejo va despacio.

Aposición

Sustantivo, pronombre, infinitivo

ninguno

Juan, tu amigo, ha llegado hoy.



Predicado

Voces

Activa

Pasiva

El sujeto realiza la acción indicada por el verbo.

El sujeto recibe la acción indicada por el verbo.



Clases

Nominal

Verbal

Verbo copulativo, que sirve de enlace.

Verbo predicativo, que añade significación.



Elementos del Predicado

Nombre

Clase

Categoría

Sustit.

Voz

Enlace

Ejemplos

Núcleo


Verbo


A/P


Juan ha llegado hoy.

Objeto Directo

Persona

Sust., pron.

le, les

A

---, a

He visto a Juan.

Cosa

Sust., pron., infinitivo

lo/s, la/s

A

---

He comprado la carne.

Objeto Indirecto


Sust., pron.

le, les

A/P

---, a, para

Compré las flores para tu madre.

Agente


Sust., pron.


P

por

El libro fue leído por Juan.

Predicativo

Copulativo

Sust., adj., pron.

Lo (neutro)

A/P

---

Juan llegó cansado.

Otros

adjetivo


Compró estropeadas las patatas.

Circunstan-

cial

Lugar

Sustantivo, pronombre o adverbio


A/P

Ninguno o cualquier preposición

Pedro llegó allí.

Tiempo

A/P

Pedro llegará mañana.

Modo

A/P

Pedro llegó sin prisa.

Cantidad

A/P

Pedro tardó mucho.

Causa

A/P

Tardó por la niebla.

Finalidad

A/P

Vino para merendar.

Otros

A/P

Vino con Juan.


Oración simple y oración compleja
Las oraciones se dividen en simples (cuando poseen un solo predicado, nominal o verbal) y complejas o compuestas (cuando poseen dos o más predicados, nominales y/o verbales). No es cierto que la oración compuesta esté formada por dos o más oraciones. Recordemos que oración es la mínima unidad gramatical que tiene sentido completo. La oración compleja se compone de proposiciones dotadas de estructura oracional. Las proposiciones pueden tener un mismo sujeto o sujetos diferentes.



Coordinación y subordinación
Dentro de una oración o de una proposición, dos palabras se coordinan cuando desempeñan idéntica función. Y dos palabras se subordinan cuando una de ellas completa el significado de la otra, y está a su servicio. De tal modo que si se suprime la palabra principal, hay que suprimir por fuerza la subordinada.
Todos los complementos del sintagma nominal y del sintagma verbal son elementos subordinados a sus respectivos núcleos, los cuales son los elementos principales del sintagma.

Coordinación y subordinación en la oración compleja
La coordinación y la subordinación no se producen sólo en el seno de una oración, sino que se pueden producir también entre las proposiciones que forman una oración compleja.
Dos o más proposiciones se unen mediante coordinación cuando una no depende de la otra. El hablante las reúne en una unidad mental superior: la oración compuesta, pero las proposiciones podrían funcionar como oraciones autónomas simples.
En la subordinación, en cambio, una de las proposiciones (la proposición subordinada) depende de la otra (la proposición principal) porque desempeña una de sus funciones. Es decir, la subordinada funciona como sujeto, atributo o complemento de la oración compleja.
Ni las oraciones subordinadas ni, muchas veces, las principales pueden funcionar como oraciones autónomas. Sólo adquieren sentido pleno en la unidad superior que es la oración (compleja).

Significado de las formas verbales
Cada forma verbal tiene significados gramaticales propios.

Los tiempos del indicativo: Presente
Expresa acción actual y no acabada. Pero ofrece otros usos importantes:
• Presente habitual: acciones continuadas que implican el momento presente.
• Presente histórico: acciones pasadas que se expresan en presente para darles mayor viveza.
• Presente futuro: indica acciones que ocurrirán a partir de ahora.
• Presente de mandato: manda con más viveza aún que el imperativo.

Pretéritos perfectos compuesto y simple
Ambas formas indican una acción acabada. El pretérito perfecto compuesto expresa una acción que ha terminado dentro de un tiempo que aún no ha terminado para el hablante. El pretérito perfecto simple expresa una acción que ha terminado también, pero dentro de un tiempo que el hablante considera terminado.

Pretérito imperfecto
Indica una acción que duraba en el pasado, sin considerar su final. Es una forma relativa, relacionada siempre con otra acción.

Futuro imperfecto
Presenta las siguientes variedades importantes:
• Futuro de obligación.
• Futuro de exigencia.
• Futuro de probabilidad.

Futuro perfecto
Es un tiempo relativo y expresa una acción futura acabada anterior a otra acción futura. Existe también el futuro perfecto de probabilidad, que expresa una opinión aproximada acerca de un hecho pasado.

Pretéritos pluscuamperfecto y anterior
Expresan una acción anterior a otra también pasada. Su diferencia es muy débil. El pretérito anterior expresa que su acción es inmediatamente anterior. Normalmente se prefiere utilizar la inmediatez por medio de adverbios como apenas, etc. Por ello, el pretérito anterior apenas se usa.


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